El fin de un año y el comienzo de otro nuevo se reduce al segundo preciso que da término al día 31 y libera las cero horas del primer día del año. Todo ocurre automáticamente. O casi.
De la misma manera en que lo hace el tiempo, avanzamos, con paso firme, sin desandar el último instante. Como el tiempo, no paramos. Seguimos hacia el futuro, ineludiblemente, porque es la ley de la vida –nos dicen– imposible regresar o renacer. Nota usted la aparición de un cambio físico o espiritual al atravesar las cero horas del primer día de un nuevo año? A mí no me pasa. Me siento feliz si antes lo era, o un poco menos si me aflige una preocupación. El tiempo rige, nosotros lo acompañamos, y le damos o no sentido si lo utilizamos para gestionar aquello que intuimos nos traerá alegría.
Cómo se hace para detenernos hoy a trazar un balance de lo que hemos vivido… No me pregunte… No me resulta… Cruzo el paso del 31 al 1 con la misma pena o gloria que procuré en los días anteriores. Cualquier día será justo para figurarse un resumen de nuestra vida. No tiene que ser éste. O pueden ser todos. Sí me gusta pensar a cada rato que seré algo más feliz el día de mañana, empeñada siempre en la esperanza, fe y sostén de la humanidad, don principal –al alcance de cualquiera– que nos permite darle al tiempo su condición de digno mientras llevamos a nuestro espíritu una breve porción de dicha.
Por mi parte, en lo que resta de este año, seguiré cocinando para usted y para los que están alrededor. Qué mejor forma de enaltecer el tiempo, me digo y doy gracias por la pasión inquebrantable.
Gracias por acompañar el blog y, esencialmente, gracias por brindarme su cariño, recompensa única, razón y esperanza para seguir dándole vida a las recetas que le comparto.
Gracias! Muchas Gracias!
Marisa Bergamasco
(Aficionada a la escritura, al buen cocinar y al buen comer y a los buenos y grandes cariños, de profesión agente de viajes, soñadora de vocación, por siempre…)
COMO AGRADECERTE TANTA DEDICACION Y CARIÑO HACIA NOSOTRAS, SEGUIREMOS EN CONTACTO .FELICES FIESTAS !!!!!
Querida Ana María,
sólo devuelvo un poco de la atención que me brindan, seré capaz de retribuirles con igual cariño al que recibo?, me pregunto… Ojalá pueda…
Muchas felicidades!!
Marisa